19/03/2018. 42 lecturas. Con sones de la marcha Amargura, interpretados por músicos de la Banda Municipal Fernando Guerrero como son Elena Junquera al piano, María Junquera al clarinete y Alejandro Silvestre a la percusión, comenzó la novena Exaltación a la Saeta organizada por la Hermandad del Gran Poder con fines solidarios.
El mantenedor del acto, Antonio Manuel Romero, tomó la palabra para hacer una reflexión sobre el significado de la saeta.
A continuación, ocuparon el escenario del Teatro Municipal Pedro Pérez Fernández las dos primera saeteras que formaban parte del cartel de esta edición. Se trata de Dore Cruz y de Paqui Barea.
Esta edición de la exaltación a la saeta, además de tener como objetivo recaudar alimentos que se destinarán a la Bolsa de Caridad de la Hermandad del Gran Poder, ha servido para rendir homenaje a la cantaora y saetera de Los Palacios, Anabel de Vico.
Fue el teniente de Hermano Mayor, José Ayala, el encargado de hacer entrega de un cuadro a Anabel de Vico en recuerdo de este emotivo reconocimiento.
Con un padrenuestro flamenco deleitó la homenajeada a todos los presentes, acompañada, como es habitual, por la guitarra del Niño del Fraile.
A continuación, volvieron a sonar las saetas, esta vez interpretadas por Antonio Manuel Romero, seguido de Nieves Sánchez y de la propia Anabel de Vico.
El broche a la exaltación llegó con la marcha “Costalero”, interpretada al cante por Sonia Cascabel acompañada por la guitarra de Fernando Larios y por los músicos Elena y María Junquera y Alejandro Silvestre. Todos ellos recibieron, como muestra de agradecimiento por parte de la Hermandad del Gran Poder, placas en recuerdo de su colaboración y participación en la novena exaltación a la saeta que ha conseguido recaudar en torno a 900 kilos de alimentos para los más necesitados.